Su fe lo impulsó a ser un destacado deportista
Daniel Colindres es un jugador de fútbol del Club Deportivo Saprissa, en Costa Rica, para quien el deporte es como la vida: “la fe y el fútbol convergen en la perseverancia, a veces queremos tener todo controlado, pero en el fútbol como en la vida, hay que prepararse, ser disciplinados y esperar en Dios”, afirma el futbolista.
Para Colindres, “lo que va a llegar, por la puerta ha de entrar”, pensamiento que le ayudó a ser paciente para llegar a una liga profesional en el balompié, a los 25 años, lo que es poco común. Motivado por sus principios y valores, fue perseverante y disciplinado, cualidades que le ayudaron a lograr, junto con el club, 6 campeonatos nacionales con el Deportivo Saprissa de Costa Rica y 3 campeonatos en Asia, con el Bashundhara Kings en Bangladesh.
Su entrega en las canchas le ha permitido obtener las siguientes distinciones:
- Mejor gol del campeonato de invierno 2016
- Mejor jugador del torneo de clausura 2018
- Mejor jugador de la Liga Premier de Bangladesh 2019
- Jugador más valioso de la Copa Federación 2019-20
- Seleccionado nacional de su país para la Copa Mundial de Rusia 2018.
El paso de Colindres por el fútbol bengalí fue para él toda una experiencia de vida. Le conmovió saber que gran parte de la población de Bangladesh vive en pobreza extrema y, en conformidad con sus principios cristianos, decidió llevar a cabo una campaña para ayudar a la niñez vulnerable de la ciudad donde radicó.
Su calidad humana lo han llevado a procurar el bienestar de la sociedad, comprendiendo los problemas y las necesidades de los demás. Recientemente ha regresado al equipo de Saprissa, con el objetivo de seguir trascendiendo en las canchas y en su preparación académica.
El deporte motiva a ser disciplinado, responsable y a estar enfocado en metas claras, afirma el jugador, quien reflexiona que el balompié permite a la niñez y a la juventud una forma de crecimiento personal para la vida y, al mismo tiempo, la conciencia de integración y respeto hacia los demás.
Concluye Colindres que el fútbol le ha enseñado a levantarse ante la adversidad y a corregir errores, añadiendo que “la fe y la perseverancia dan un resultado positivo en el momento que menos se espera, para alcanzar la meta que se quiere”.
